Hoy en día, la almendra es un ingrediente esencial en la dieta mediterránea, arraigado a la tradición y gastronomía española. Sus cosechas se trabajan alrededor de España, durante todo el año, para exportar toneladas de almendras españolas a todo el mundo. Por eso, con el inicio de la primavera, queremos que conozcas todos los detalles del ciclo de la almendra.
En Importaco, llevamos más de 75 años trabajando como productores de almendra. Todos estos años de experiencia se traducen en la calidad de nuestra almendra, que cuidamos desde su cultivo hasta que se convierte en producto final.
En este post descubrirás lo detalles del ciclo de la almendra Itac Professional, desde que el producto se recolecta en el campo y se procesa en fábrica, hasta que se sirve como producto final o como ingrediente de la industria alimentaria. Un producto típico de la dieta mediterránea, cuyo cultivo tiene diferentes etapas, todas ellas importantes en el producto final.
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El cultivo de la almendra es un proceso cuidadoso y de vital importancia dentro de la cadena de suministro de este fruto seco. La vida del árbol y su producción varían en función del tipo de cultivo: tradicional, intensivo, superintensivo, etc., y de otros muchos factores ligados al cuidado, terreno, climatología, etc.
El ciclo de la almendra comienza en invierno, los almendros pasan por un período de latencia o de reposo, pierden sus hojas y bajan su actividad natural. Este periodo se caracteriza por el descanso invernal y los cuidados, durante esta fase, son claves para la calidad de la almendra y el éxito de la cosecha.
Durante este periodo, algunos suelos almacenan agua de lluvia cuando es posible, que será vital para el posterior periodo de crecimiento del árbol. Los árboles, por su parte, necesitan acumulación de horas de frío por debajo de 7ºC y absorción de nutrientes, a través del agua, para la siguiente fase de desarrollo. Hacia el final de este periodo, los brotes comienzan a hincharse en las ramas del almendro preparándose para la floración.
En esta fase del ciclo de la almendra son imprescindibles las siguientes actividades para asegurar una cosecha:
Es en el comienzo de la primavera cuando empezamos a ver los primeros almendros florecer. La etapa de la floración del ciclo de la almendra varía en función de cada variedad de almendro:
Entre febrero y marzo, según las variedades, los brotes de almendro se transforman en características flores blancas y rosáceas. El calendario de floración de los almendro empieza en torno a febrero y finaliza generalmente en marzo, dependiendo de si la variedad es más tardía o más temprana. Las variedades más tempranas, tienen por ello mayor riesgo de sufrir heladas que pueden afectar el fruto.
Existen variedades que son autofértiles, y otras que necesitan la acción de insectos como las abejas.
La flor recién fecundada desarrolla el fruto que aumenta su tamaño durante los meses siguientes hasta la maduración, durante la temporada estival.
Esta fase se desarrolla durante los siguientes meses, y factores como el agua, las plagas y enfermedades o la climatología pueden influir en el correcto desarrollo del fruto.
De marzo a junio, y una vez completada la floración y la fecundación de los futuros frutos, se inicia el cuajado y desarrollo de los mismos. Los granos de almendra maduran y crecen a tamaño completo, con la cáscara endureciéndose a su alrededor, ambos protegidos por otra cáscara exterior protectora más blanda.
Una vez que cesan las lluvias de primavera y el clima se calienta, los agricultores pueden regar sus campos para apoyar el crecimiento, siempre buscando la eficiencia en el uso del agua de forma responsable. En este momento, las almendras verdes también se pueden cosechar para diversos usos culinarios.
A partir de ahí, la disponibilidad de los nutrientes y el agua son esenciales para la evolución de las almendras. El nivel productivo dependerá también de la capacidad del agricultor para garantizar el correcto desarrollo a lo largo de los meses de primavera y verano.
Cuando en verano el fruto abre su corteza exterior que la protege durante los meses productivos,ello indica que está en estado óptimo de maduración y que ha llegado la hora de la cosecha.
La técnica más común es la que hace uso del llamado ‘paraguas invertido’, mediante la que el tractor efectúa un vibrado del almendro, para que caiga el fruto y pueda ser recogido en un apero en forma de paraguas de gran tamaño.
Tras la recolección, el producto debe ser acondicionado retirando sus cáscaras para obtener el fruto.
Las almendras enteras se pasan por una máquina rompedora que dispone de rodillos para partir la cáscara y que separa, a través de un cribado, todas las materias extrañas del fruto limpio.
En Importaco, dada nuestra experiencia como productores de almendras, realizamos una minuciosa selección en varias fases para eliminar cualquier cuerpo extraño que pudiera aparecer, ayudándonos del mejor equipo industrial.
Posteriormente, calibramos nuestros productos por tamaños, para adaptarlos a las necesidades concretas de nuestros clientes, y se almacena en cámaras frigoríficas para garantizar su frescura.
Tras el proceso de rotura, el proceso inmediato queda dividido en la fase de escaldado, repelado, secado, enfriamiento y selección.
La piel se pela después de mojar el grano de almendra en agua caliente a 85-100ºC durante varios minutos. A continuación, los granos se secan con aire caliente y después se enfrían a temperatura ambiente.
El resultado de este proceso es la almendra entera pelada y natural, a partir de la cual se realizan diferentes procesos de acuerdo a la gama de formas y tamaños para satisfacer las exigencias de nuestros clientes.
El grano de almendra, con piel o sin piel, se procesa según la tipología de producto final o se envasa como almendra entera.
En Importaco, contamos con una planta exclusiva para procesar almendra libre de alérgenos ( como puede ser el cacahuete) , a través de maquinaria dotada de la última tecnología para hacer una correcta distribución de almendra al por mayor.
Obtenemos así productos derivados de la almendra o variaciones de la misma, como: harina de almendra, granillo de almendra, palitos, cubitos, láminas o almendra a mitades.
Una vez terminado el producto, se debe pasar a la fase de envasado. En Importaco, envasamos las diferentes gamas de almendra respondiendo a las necesidades de nuestros clientes, que pueden elegir entre embolsados, cajas de cartón, envases al vacío, sacos de rafia y big bags. Con nuestra tecnología de envasado garantizamos la mayor seguridad, eficiencia logística y operativa.
Durante todo el ciclo de la almendra, es importante garantizar la seguridad alimentaria para asegurar la calidad del producto final. Es por eso que en Itac Professional cuidamos hasta el último detalle en el proceso de producción de la almendra y acreditamos que todos nuestros productos tienen la máxima garantía.
Gracias a que realizamos exhaustivos controles previos a la compra de la materia prima, durante la recepción de la misma, entre procesos y previa a la expedición de la materia final; contamos con el aval de diferentes certificados de seguridad alimentaria. Por esta razón Itac professional es tu ideal productor de frutos secos.
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